POEMA 99
las estrellas no salieron
entre el cielo y el infierno
juegan a los dados en un bar de carretera
es nuestro destino
lo que apuestan
nos sacuden, nos arrojan
me aferro a las volutas de tu risa
a tu cintura de oro y ámbar
estar cerca de ti,
siempre me alejará de la muerte
eres mi coartada
mi espejo retrovisor
5 comentarios:
Me gusta este poema; especialmente los versos finales, que le dan mucho brillo.
Un abrazo grandote, amigo.
Llevabas razón, hemos perdido esta costumbre de leernos por esta vía... Ayer en los poemas que llevaste leí este y recordé como puede parecer simples la manera como alguién es capaz de poner en palabras lo que tantos sienten. Escribamos, pues! :)
Este poema no lo conocía. la ide de un destino que nos maneja o juega con nosotros y el amor como vida y refugio ante la adversidad es muy sugerente y con un final redondo. Es muy hermoso, Marcelo.
Rosario Miloro
Es una gran suerte tener
siempre alguien o algo a
que agarrarse.
Un fuerte abrazo
Ya no me acordaba de lo bien que escribes. Bueno, sí, por eso vuelvo a leerte ya que te prodigas poco. Deseando estoy de leer tu libro.
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